Historia de Villapalacios. Temas.
La Iglesia de San Sebastián. Las campanas

 

 

Desde noviembre de 2022 el toque manual de las campanas en España está reconocido por la Unesco
como Bien Cultural Inmaterial de la Humanidad

 

 

Por José Ángel Montañés. 27 de octubre de 2019. Actualizado el 30 de noviembre de 2022

 

 

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El campanario de la Iglesia de San Sebastián de Villapalacios con sus cuatro campanas, dos de ellas del siglo XVI.
Arriba: campanas de Santa María y Santísimo Cristo (i) y la del Santísimo Cristo. Abajo: San Sebastián y Hermano Francisco.

 

 

El toque de campana ha sido, y sigue siendo, en pequeñas localidades, el medio de comunicación de la sociedad rural. Con sus diferentes repiques, el sonido de una campana informaba de un hecho cotidiano o excepcional como un incendio, la muerte de un vecino, o la celebración de una fiesta. Pero también organizaba y marcaba el ritmo de la comunidad. El avance tecnológico ha hecho que el toque manual de las campanas se haya ido perdiendo, sustituido por el impulso eléctrico, como ha ocurrido hace poco en el caso de la iglesia de San Sebastián de Villapalacios, o incluso haya desaparecido dando paso al silencio más absoluto. Por suerte, en Villapalacios todavía hay varias personas que saben tañer este instrumento musical ancestral, aunque solo sea en las grandes fiestas o en los acontecimientos destacados.

Cuatro campanas, dos del siglo XVI y dos del siglo XX

En la iglesia de San Sebastián existen cuatro campanas. Dos de ellas antiguas, del siglo XVI y las otras dos del siglo XX.

En la localidad de Villapalacios, lugar donde han desaparecido muchos de los vestigios del pasado, se conservan dos de las primeras campanas que coronaron la torre de la iglesia, si bien fundida con el metal de otras anteriores, como se informa en un documento fechado el 14 de septiembre de 1586 y que está recogido en el Libro de Actas municipales, 1585-1612, folio 15. En esa fecha el concejo acordó fundir dos nuevas campanas para la iglesia ya que las anteriores estaban rotas: "que dos campanas que ay en la torres de la iglesia estan quebradas". Aprovechando que "de presente ay en esta villa oficial que las podra tornar a fondir" los reunidos acordaron que el campanero que las tenía que realizar sería Pedro de la Llama, vecino de Alcaraz. El precio del trabajo se estipuló en 60 ducados, además de dos fanegas de trigo, y también se acordó como retribuir el trabajo: 20 ducados y el trigo cuando las haya terminado, 15 más en Navidad de 1587 y otros 20 ducados un año después, en navidad de 1588. Por lo que intuimos que se le entregaron los cinco que faltan tras la firma del acuerdo.

Las campanas tenían que ser de "nueve quintales mas o menos" la grande, y la pequeña "de cinco".

En la reunión estuvieron presentes, aparte del cura de la parroquia, Andrés García, los miembros del gobierno del concejo: los alcaldes ordinarios Juan López Ballestero y Miguel Martínez, los regidores Martín Sánchez y Pedro Cristóbal del Val, los vecinos Diego de Cárdenas y Gerónimo Perote, García de Molina, Cristóbal de Molina, Juan del Cepillo, Pedro García Fajardo, Bartolomé Sánchez Vico, Alonso de la Muela, Felipe Martínez y el labrador Pedro Molina, muchos de los cuales nos suenan porque desempeñaron un papel activo en el gobierno de la localidad de estos años. También estuvo presente el gobernador del Conde en este momento, Fernando Manuel de Lodeña.

El documento recoge que el campanero aceptó las condiciones y que se comprometió a fundir las campanas todas las veces "si no salieren buenas y perfectas que las tornara a fondir a su costa hasta que no toquen sin ser toda perfección sin que se le de cosa alguna". Un profesional responsable, sin duda el tal de la Llana. Todos los que sabían firmaron el documento.

No sabemos si se cumplió el trato entre el concejo y el campanero, lo que si conocemos es que el 26 de enero de 1595, cuando ya habían pasado nueve años del acuerdo, se consagraron tres campanas en la iglesia de Villapalacios, durante la visita de Don Diego de la Calzada, visitador general del Arzobispo de Toledo. Lo recoge el segundo Libro de Bautismos de Villapalacios (1568-1618) conservado en el Archivo Diocesano de Albacete, folios 142 v. y 143.

 

 

Página del libro de Bautismo II (1568-1618), folios 142 v. y 143, y la firma de Don Diego de la Calzada, a la derecha.

 

En la breve reseña de la visita, que anotó el párroco Andrés García, el mismo que escribió las confirmaciones de la página anterior, sabemos el nombre que se les puso a estas tres campanas: San Cristóbal a la mayor, a la mediana Nuestra Señora y a la más pequeña San Sebastián. También se explica que se realizó todo el ritual de ceremonias, unciones y oraciones que mandaba la iglesia católica ante el propio cura y el titular del beneficio parroquial Pedro González de Villarreal, los alcaldes ordinarios Juan Gómez y Andrés Garrido, el alcalde de la hermandad, Bartolomé Sánchez Vico, los regidores Cristóbal Martínez y Pedro de Molina y los vecinos Pedro López Osorio, Miguel Martínez, Cristóbal Martínez, Sebastián de Rioja, Sebastián López y el sacristán Francisco de Cerecuela.

Llegados a este punto tenemos que admitir un error. Hasta ahora habíamos asegurado que una de las campanas de la iglesia de San Sebastián, la de Nuestra Señora, era de las más antiguas de la provincia de Albacete ya que la habíamos datado en el año 1505, tan solo por detrás de la de la Torre del Tardón de Alcaraz que lleva fecha de 1447 (y que pesa 614 kilos), según recoge José Sánchez Ferrer en Antiguas campanas de Torre de la provincia de Albacete (IEA 2003).

Tras conocer este texto del libro de Bautismos podemos decir que la campana lleva por fecha 1595 y no 1505 y coincide con la fecha en la que se consagraron las tres campanas. O sea, que la campana de Nuestra Señora se ha conservado en su sitio por espacio de cuatro siglos, desde que fuera consagrada.

Fecha de "1595" en la campana de Nuestra Señora

La inscripción que hemos podido leer en esta campana es:

-OVIS * SANTA* MARIA * INT--- ANNO *cruz* 1595 TLEO * ECCE * CRVCEM * DOMINI * FVG

Esta fecha posterior, de todas formas, la sigue situando entre las campanas más antiguas junto con la del Tardón mencionada, dos de la iglesia de la Asunción de Hellín, de 1529 (de 1.275 y 670 kilos de peso respectivamente); la de la Iglesia de Santiago Apostol de Liétor, de 1572 (24 kilos de peso); y la que se conserva en la sacristía de la iglesia de la Trinidad de Alcaraz, del siglo XVI, (de apenas 40 kilos de peso).

También se conserva la campana consagrada en honor de San Sebastián, patrón de la iglesia, que tiene la misma factura y realización. En ella no se puede leer ninguna fecha, pero si parte de la inscripción que da al interior de la torre:

* SEBASTIANE * ORA * PRO

Terremoto de Lisboa de 1755


Ya en el siglo XVIII, en concreto el día primero de noviembre de 1755, la localidad, como gran parte de toda la península ibérica, sufrió los efectos de uno de los terremotos más devastadores que se recuerdan. Con epicentro en la ciudad de Lisboa los efectos del mismo en Villapalacios se conocen gracias al informe mandado a Madrid, por orden real, el 30 de noviembre. Sin tener que lamentar ninguna víctima en Villapalacios el terremoto se saldó con una casa hundida y muchas afectadas, siendo la iglesia, según el informe, el edificio más afectado pues la bóveda del crucero se hundió, debido al mal estado en que estaba y las paredes de la capilla mayor y la torre del campanario se vieron afectadas gravemente. El estado en que quedó fue tal que se propone que se busque otro lugar para oficiar la misa. No sabemos cómo afectó a las campanas.

En 1982 se fundió una nueva campana, después de terminar la última gran restauración de la iglesia; la dedicada al hermano Francisco del Niño Jesús. Da noticia el sacerdote de entonces, Miguel González López en un escrito que se ha conservado en el Libro de Visita Pastoral-Régimen Parroquial, que se conserva en el Archivo Parroquial de Villapalacios:

Nueva campana
Con la restauración de la torre quedaba un hueco vacio, pero quedó ocupado por una campana de bronce de 152 kilogramos de peso, con yugo metálico para el volteo, fundida en la casa Manclus de Valencia con un coste de 190.642 pesetas Se le dio el titulo de Hermano Francisco del Niño Jesús. Fue costeada por los concejales de U.C.D. y A. P. con la gratificación oficial que les correspondía por su cargo: fueron estos: Hipólito Linares, Silvino Resta y Salvador Rodriguez. Fue bendecida el 29 de agosto de 1982, domingo XXII del tiempo ordinario. Para que quede memoria lo escribo aquí, fecha et supra. Miguel González López

Según el escrito del párroco, la campana fue fundida en Valencia, en la casa Manclus, situada en la localidad de Rafelbunyol, que se extinguió en 2017 dando paso a Relojes & Campanas Monumentales, en el municipio de Náquera y que ofrece trabajos de todo tipo alrededor del mundo de las campanas, yugos de madera, matracas, relojes mecánicos y monumentales y automatización).

Sabemos por las notas del cura, que la campana pesa 152 kilos, que costó 190.642 pesetas que costearon los concejales de Alianza Popular (germen del actual Partido Popular) y de la UCD de Adolfo Suárez, y que se le dio el nombre del Hermano Francisco del Niño Jesús, en honor del carmelita nacido en esta localidad. El día que fue izada con la pluma de una grúa fueron muchos los vecinos (casualmente yo estaba allí) que no quisieron perderse el acontecimiento.

Años más tarde, en 1988, se realizó otra operación relativa a las campanas. Lo recogió, de nuevo, por escrito el sacerdote Miguel González López en el libro en el que anotaba todo lo que acontecía:

Refundación de la campana gorda
El campanario tiene en la actualidad cuatro campanas: una es de reciente adquisición como consta en el folio 27 de este libro; las tres restantes datan: la de Santa Maria de 1505, la de San Sebastián de 1520 y la más gorda, también dedicada a San Sebastián de 1900. Esta última estaba rajada y había perdido mucho sonido, por lo que decidí refundirla.

La fundieron en los talleres Manclús de Valencia y fue dedicada al Santisimo Cristo patrono de Villapalacios, para evitar duplicidad de nombres que antes se daban.

Fue bendecida y colocada en la torre el día de la Inmaculada Concepción dentro del Año Santo Mariano. Y para que conste firma la presente en Villapalacios a 8 de diciembre de 1988. Costó 289.088 pesetas y pesa 254 kilogramos. Miguel González López.

 

Según el sacerdote, que proporciona fecha a las campanas más antiguas, en concreto a la de San Sebastián de 1520, algo que nos invita a seguir trabajando, había una segunda campana en el campanario dedicada al patrón de la localidad del año 1900 que estaba rajada y no sonaba bien.

Por eso, asegura, decidió fundirla en los mismos talleres Monclus de Valencia y crear una nueva. Es en ese momento cuando le cambió el nombre y le puso Santísimo Cristo, "para evitar duplicidad". Esta refundición costó 289.088 pesetas y esta campana, la "gorda", pesa 254 kilogramos.

 

Por tanto el nombre y la fecha de las cuatro campanas de Villapalacios es:

- Santa María (1590, siglo XVI)
- San Sebastián (¿1520?, siglo XVI)
- Hermano Francisco (1982) 152 kilos (190.642 pesetas)
- Santísimo Cristo (1988) 254 kilogramos (289.088 pesetas)

 

Y algunos de los toques de las campanas:

- Ángelus. A las doce del mediodía, para los que estaban trabajando en el campo.
- Arrebato. En caso de fuego, en el campo y el casco urbano (con la campana grande, para que todo el mundo se enterara. El mismo toque en caso de que se haya perdido una persona.
- Misa de fiesta.
- Muerto; diferente si es un hombre, mujer o niño (toque a ‘gambeta’).
- Procesión.
- Tantaranulo o tantaranublo; para ahuyentar las nubes y atraer el agua a los campos.

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Eliseo Martínez Roig, en el número 63 de la revista Zahora de la Diputación de Albacete recogió las campanas y sus sonidos de la provincia en el volumen llamado: Albacete, campanas y toques, un patrimonio sonoro. Uno de esos capítulos está dedicado a Villapalacios. Os dejo el pdf de la revista.

Uno de los grupos más activos en la investigación y difusión del toque de las campanas es el del grupo Campaners.com, la página oficial de los campaneros de la catedral de Valencia que también le dedica un capítulo al toque de las campanas de Villapalacios, con videos grabados en 2016. Clica aquí para poder verlo.

 

Si quieres escuchar cómo tocaban las campanas de Villapalacios en 2009, a manos de los campaneros: José Muñoz Membrilla, Menda y Jose Linares Quijano, Reque. Clica sobre las imágenes de abajo:


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